La visita guiada por el Madrid Medieval comienza en la plaza
de la Armería, donde se concentran nuestros nervios, y nuestros “clientes”
(sobornados por Geli para que se comporten como deben). Éramos el grupo más
numeroso, todos los alumnos de primer curso de GIAT estaban ansiosos por escucharnos, y eso no fue un gran problema, gracias al
micrófono, que intentaba eclipsar cualquier otro sonido, (aunque en ocasiones
no lo consiguió).
Las damas de la corte de Alfonso VI, junto con un caballero
templario y una tabernera, fuimos los encargados de guiar por estas calles y
plazas que nos remitían a los primeros tiempos de la villa.
“En mi experiencia
personal, algunos datos olvidé mencionar, debido a los nervios posiblemente, o
a que no me podía centrar. Sin embargo sentí comodidad ante un grupo tan amplio
con ganas de escuchar.”
Tras estos versos medievalescos, debo decir que me encargué de la muralla y de la Calle Segovia, dos explicaciones muy relacionadas
entre sí. En la muralla pude aprovechar un panel con un plano en el que
aparecen coloreados los lienzos de muralla del siglo IX y del siglo XII, muy
gráfico para poder situar al grupo. Como este panel era muy codiciado por los
guías de la zona, preparé un plano para recordar y recalcar el trazado de la
muralla. Lo más significativo son, sin duda, los restos de muralla que se encuentran en el
Parque de Muhammad I, que están siendo reconstruidos.
Como apoyo gráfico
también conté con la hornacina de la Virgen de la Almudena, que se encuentra en
el lugar donde Alfonso VI la encontró, junto a la desaparecida Puerta de la Vega.
Respecto a los alumnos que vinieron como clientes, se puede
decir que mostraron bastante interés, y se comportaron adecuadamente, siempre
teniendo en cuenta, que era una visita larga y pesada en algunas partes del
recorrido. Creo que mis compañeros realizaron su trabajo de una manera muy
satisfactoria, viéndose una evolución muy clara en algunos casos. El ir caracterizados
nos ayudó a poner en situación histórica la visita
y a que todo fuera más vistoso, haciendo un pequeño pase de modelos en Puerta Cerrada,
como excusa para explicar la vestimenta medieval.
En conclusión, ha sido una buena experiencia, y estoy
deseando que llegue la siguiente.
Teresa L.
Teresa L.